CUBA: UNA FAMILIA, UN BARRIO, UN CDR

Por: Gustavo Sánchez

Fidel está sobre la tribuna. Mientras suenan los petardos el pueblo aclama a su líder. En el aire, además del salitre se respira el júbilo de la Revolución naciente dejando sin lugar al miedo, porque donde hay confianza no caben los temores. Miles de cubanos escuchan atentos, persiguen cada movimiento y estallan por minutos en vítores; “El Caballo”, justo como lo llamaron al bajar de la Sierra en poemas y cantos, acaba de fundar los Comités de Defensa de la Revolución.

Páginas de Historia se han escrito desde entonces, en ellas los CDR también plasmaron sus líneas demostrando la funcionalidad de una organización multitudinaria, representante de la sociedad en toda su dimensión.

Como albaceas de la seguridad y bienestar comunitario, en una Isla no exenta a los “ataques” atmosféricos y políticos, los Comités desde su origen, se transmutaron en guardianes callejeros, promotores de salud, constructores, instructores de arte, hasta en el vecino preocupado con el que siempre se puede contar; y aunque estas funciones aún son de vital importancia, hay otras que quedaron obsoletas o que pasan desapercibidas, generando la interrogante: ¿Funcionan hoy los CDR?

TREN A TODA MARCHA

“Para ser prácticos, realistas, hay que reconocer que estamos en otro contexto, que se diferencia mucho de los momentos iniciales cuando se fundaron los CDR y de algunas décadas posteriores”; así afirmó el Segundo Secretario del Comité Central del Partido, José Ramón Machado Ventura, en la clausura del VIII Congreso de los Comités de Defensa de la Revolución.

Cinco años después de estas palabras los CDR continúan perfeccionándose conscientes de los nuevos retos, con numerosas batallas vencidas y una firme estrategia para conquistar otros conflictos, y aunque en ocasiones esos combates pasan desapercibido por el ojo público, desde el silencio y la modestia propia de los revolucionarios, las filas cederistas continúan dando el pecho a los cañones enemigos.

Además de las calles, los Comités han invadido de a poco las plataformas digitales que gozan de popularidad y que a su vez son empleadas por las grandes potencias hegemónicas para inocular paulatinamente hábitos consumistas propios del capitalismo, intentando minar los principios básicos de una Revolución socialista como la nuestra.

Teniendo como combustible y motor a los sectores más jóvenes de la sociedad, los CDR aplican estrategias encaminadas a defender la autoctonía propia de los cubanos, desmintiendo las campañas que surgen desde la oposición estadounidense y que invaden los medios de comunicación extranjeros y otros no convencionales.

Así mismo la organización de la familia cubana, desarrolla campañas educativas que, desde los litorales y zonas de difícil acceso abogan por el cuidado de la flora y la fauna; entablan vínculos con los campesinos y pescadores aunándolos en “células” que desde estos sitios intrincados contribuyen a evitar conductas inapropiadas.

Ejemplo de excelencia son los Destacamentos Mirando al Mar, de los que existen 309 con un total de 7658 miembros; entre sus funciones está tal como su nombre lo indica la vigilancia de las costas, acción que ha permitido frustrar ataques contrarrevolucionarios, penetración de la droga al país, depredación de la fauna marina, además de salvar numerosas personas que han intentado salir del país de manera ilegal en embarcaciones con muy malas condiciones constructivas.

Donaciones de sangre, círculos de interés, proyectos comunitarios, son parte de las ramificaciones que tienen los CDR, un fragmento de esas funciones vitales que componen el soporte social de Cuba, generando desde la unidad del barrio el equilibrio necesario para que la Revolución avance como una locomotora indetenible.

CAIMÁN QUE ANALIZA Y DEBATE

Los CDR, desde su accionar en las comunidades, han sido protagonistas de trascendentales hechos que hoy mueven a Cuba, y que abrieron las puertas a un 2019 de cambios significativos; el referendo popular, que sometió a votación la factibilidad de nuestra Constitución el pasado 24 de febrero, es uno de ellos.

Desde el inicio de los análisis barriales de la Ley de leyes, los Comités estuvieron presentes en miles de comunidades de la Isla, ayudando a construir una Carta Magna que respaldara los derechos de cada cubano al tiempo que los direccionara jurídicamente.

Además de implementar campañas divulgativas convocando persona a persona, argumentando la importancia de la participación popular en el referendo, los Comités trabajan de conjunto con la Dirección de Identificación, Inmigración y Extranjería, conciliando los datos referidos a la cantidad de electores de acuerdo con las estructuras de bases, para alcanzar la mayor calidad posible en los listados electorales.

Numerosas son las acciones, pero son los Barrios Debates por el deber Patrio y Antiimperialista, en su tercera etapa, quienes cobran mayor protagonismo en la actualidad, respondiendo a las aspiraciones de Raúl cuando decía: “esta batalla se gana si logramos la real comprensión y movilización del pueblo”.

Con una fuerte carga instructiva y de análisis, los “Barrios Debates…”, esclarecedores en sus contenidos, motivan reflexiones sobre temas de gran interés social, cobrando una especial importancia el examen profundo del texto constitucional.

Tras un buen precedente, enraizado en los tradicionales encuentros cederistas bajo alguna luz en la calle, y perfeccionados desde la primera etapa de estos eventos de barrio iniciados en octubre del 2016, los actuales debates permiten al pueblo expresarse libremente aportando opiniones que ayudan a edificar una Cuba mejor.

El 10 de enero tuvo lugar en el capitalino reparto de Jaimanitas el barrio debate piloto de esta etapa, que iniciaría un período de importantes intercambios populares junto a reconocidas figuras del panorama intelectual en el país, diseccionando paso a paso los artículos de la Constitución y respondiendo a interrogantes nacidas al calor de la reunión.

Los artículos de mayor interés giran en torno al trabajo en el sector no estatal, el matrimonio igualitario como institución social y legal, las salidas al extranjero, la protección animal, el sistema electoral y las reelecciones presidenciales, la obligatoriedad de las familias a cuidar de los ancianos, generando opiniones que reafirman, que tal y como el machete fue en su tiempo un arma para los mambises, hoy nuestra arma es el Sí rotundo a la Constitución.

Hasta el momento se han desarrollado en las 15 provincias del país y el municipio especial Isla de las Juventud un total de 1405 debates, donde han participado más de 113 883 personas, que educadas en base a la reflexión visualizaron el video “Socialismo, Antimperialismo y Continuidad”, para posteriormente reflexionar junto a varios panelistas sobre la realidad que se viven los barrios de la Isla, ubicándolos en el contexto latinoamericano actual.

Son pocos los países donde existe un proceso de genuina democracia como el que protagoniza el pueblo cubano, investido como constituyente y consultado como tal, con el objetivo de perfeccionar la nueva ley de leyes de la nación; un privilegio que los cederistas saben que deben defender, siendo consecuentes con la obra revolucionaria que otros millones de reconocidos y anónimos héroes, han construido desde el inicio de las gestas independentistas.

Hoy es un deber cívico proteger la Revolución, y la unidad social debe ser tan apretada, como relataba el Apóstol era la que guardaban las raíces de los Andes; es momento de claridad de ideas y convicciones firmes, porque el imperialismo recrudece su agresividad con todos los pueblos, que desde la base socialista persiguen y defienden su libertad.

Cuba continúa latiendo con un solo corazón, convertida en un barrio gigantesco, un solo CDR; el país es a su vez un sistema entretejido de tradiciones combativas, anhelos y proyectos que se materializan con el accionar de todos; los comités son entonces una familia que ayuda y educa, resguarda y persigue la paz, aunque si hiciera falta defender a sus hijos, como dijera Fidel: “está dispuesta actuar con toda la energía que sea necesaria cuando se lo ordene la Revolución”.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio